Nos reunimos en la oficina de Carmen en la sede de Start-Up Chile, a unas pocas oficinas de distancia del Área de Marketing, donde he estado pensando en lo que me gustaría preguntarle. Nunca había estado en esa oficina, con su vista del Cerro Huelén salpicado de rascacielos, pero la reconozco porque la puerta casi siempre está abierta. Carmen me invita a sentarme.
Partamos por cómo comenzó todo: Le pregunto a Carmen cómo llegó a gestionar las divisiones de Emprendimiento y Start-Up Chile de Corfo, roles que asumió en mayo y agosto de 2022 respectivamente. “He trabajado muchos años con nuestro vicepresidente, José Miguel Benavente […] y cuando me invitó a ser parte de su proyecto y a colaborar con él en Emprendimiento, dije claramente que sí”.
Antes de regresar a Chile para asumir este cargo, Carmen pasó los últimos once años y medio viviendo en el extranjero. Siempre ha enfocado su energía en el mundo del emprendimiento y la innovación; salió de Chile para estudiar su doctorado en Desarrollo Internacional en la Universidad de Oxford y fue cuando estaba trabajando en Bogotá para un fondo de capital de riesgo chileno y dando clases en la Universidad Externado de Colombia cuando llegó el llamado.
Inicialmente, le preocupó la idea de trabajar con equipos tan grandes por primera vez pero siempre estaba decidida a hacer las cosas bien y hacerlas “no tan lenta y a un buen ritmo”. Sus miedos se desvanecieron rápidamente. Según Carmen, casi de inmediato se dio cuenta de que: “Yo sé que lo puedo hacer y lo puedo hacer bien”.
Los equipos que dirige son, para Carmen, lo que hace que todo valga la pena. Según ella, la gente con la que trabaja está llena de energía, deseosa por trabajar y siempre “mirando cómo mejoramos la política pública en emprendimiento”. A lo mejor esto sea, en parte, un resultado de su propio estilo de liderazgo, ya que trabaja de manera “bastante cercana” a sus equipos y siempre ha sido su objetivo “generar un ambiente de trabajo cálido donde la gente quiere ir todos los días”.
Parece que es una ayuda definitiva que el ambiente de trabajo sea tan paritario en cuanto al género. Carmen me dice que, “en el equipo directivo de emprendimiento somos puras mujeres. Entre nosotras nos apoyamos mucho porque entendemos qué significa todo lo que es la maternidad junto a la casa junto a tener estos puestos de trabajo de alta responsabilidad.”
Desde nuestra conversación, sale un retrato de una líder mujer resuelta y dispuesta a hacer todo lo que pueda para cambiar las cosas que le frustran sobre el mundo del emprendimiento, y más allá de esto, sobre la desigualdad de género. Se esfuerza en entender la problemática en el ámbito académico, en criar a sus hijos de manera justa, en implementar nuevas políticas y en ampliar la conversación hacia todo eso.
G: ¿Me puedes hablar por un lado, de las ventajas, y por otro, de los desafíos, de ser Gerenta, líder mujer, de Emprendimiento y Start-up Chile de Corfo?
Las ventajas…las mujeres siempre hemos tenido que adaptarnos a diferentes roles, y el ambiente del emprendimiento es muy dinámico – va cambiando constantemente y muy rápidamente. Por lo tanto requiere flexibilidad, y hay una cierta flexibilidad del lado de las mujeres a trabajar.
Dentro de los desafíos, todavía hay un sesgo de cuánto se sabe, de la experiencia, el expertise, que una mujer puede tener. Mientras más tecnología hay detrás, hay un sesgo de que a las mujeres nos cuesta entenderlo más o nos cuesta a lo mejor desarrollar más ese tipo de emprendimientos. [Hay que] decir que en el mundo del emprendimiento conocemos y somos capaces de entender la tecnología independiente del género y de desarrollarla y de contribuir.
G: Y esto sería por la brecha en la educación?
Sí. En Chile todavía hay una amplia brecha en el porcentaje de hombres y mujeres que estudian carreras basadas en STEM. Sin embargo, las mujeres que estudian estas carreras en general tienen un mejor desempeño académico, aunque después esto a veces no se traduce en mejores puestos de trabajo, o puestos de liderazgo, tampoco en mayores mujeres emprendiendo. Todavía nos falta.
G: Sí, todavía hay ese glass ceiling, barreras laborales. Pero las cosas van mejorando según tu perspectiva?
Van mejorando. Estamos mirando mucho de que haya más emprendedoras liderando proyectos, mientras que también nos tenemos que preocupar que haya más mujeres en todo el ecosistema de emprendimiento, en los fondos de capital de riesgo, más mujeres inversionistas, mentoras, todas las instituciones que forman el mundo.