¿Por dónde empiezo? Eso me preguntaba al comenzar a escribir este artículo, porque hablar de Talent Management es como lanzarse a un océano de información, de allí que dar con un tema para explorar en las siguientes líneas no sea tarea fácil. Por fortuna, tengo una fuente de inspiración a la cual acudir: las experiencias de los emprendedores. Recordé esas reuniones con los emprendedores de Start-Up Chile donde sus primeras frases fueron “Quiero atraer Talento, ¿Por dónde parto?”, “Necesito un CTO, ¿dónde lo busco?”, “Quiero trabajar cultura, pero qué es eso?”
Es fácil marearse con tanta información, casos de éxito, y tendencias en cuanto a las estrategias de Talento. Además, puede ser abrumadora la sensación de estar llegando tarde con la implementación de estrategias de gestión del talento, pero para aliviar la ansiedad asociada a lo anterior, resulta aconsejable entender primero qué es ese “Talent Management” del que tanto se habla hoy en día.
Tal y como hago en las reuniones con emprendedores, comenzar con la noción de “Recursos Humanos” parece ser un buen punto de partida y sé que suena “old school”, sin embargo, de allí nace todo: cómo gestionamos mejor nuestros recursos.
Como sea que fuere, ya que estamos en el mundo de la innovación y todo cambia de manera ágil, el foco se mueve hacia las personas y no sólo atiende a los procesos (lo cual me encanta, por cierto) pero hay que recordar que cualquier cosa que hagamos desde Talento, que tenga como centro a las personas, debe sumarle al negocio de modo que le sirva de base de crecimiento. De no hacerlo, puede que tengamos algunos problemas en el futuro, los cuales hubiésemos podido anticipar cuando habían 10 o 15 personas en el equipo, y no cuando llegamos a más de 50, y todos se encuentren trabajando remoto con diferentes husos horarios.
Una pregunta válida puede ser “¿Por qué hablar de Talento ahora?”. ¿La respuesta? Se quiera o no, es que siempre está presente, desde que son dos fundadores contra el mundo, hasta cuando contratas cargos con nombres y funciones que ni sabías que existían.
Para comenzar a construir o mejorar tu estrategia de Talento, debemos entender qué tenemos hasta ahora, y hacia dónde queremos ir. Adicionalmente, debe estar siempre conectada a lo que yo llamo “hitos de crecimiento”, que son todos aquellos hitos importantes dentro del negocio, ya sea número de clientes, crecimiento en ventas, capital levantado, etc.